"¿Por qué en el aula no todos se motivan y participan de la misma manera?"
La clave está en cómo los estudiantes se involucran cognitiva y emocionalmente.
En "Las sillas no son para sentarse, son para pensar" la autora nos invita a poner el foco en el aprendizaje y en propiciar espacios de construcción activa de saberes. Se trata de maximizar, potenciar y capitalizar las experiencias pedagógicas.
La metacognición es el punto de partida para que los alumnos se comprometan con sus trayectorias académicas y tengan la oportunidad de "pensar en pensar", es decir, de darle sentido a aquello que aprenden.
Como es habitual, Laura nos ofrece aportes significativos de las neurociencias de la mano de reflexiones, actividades y propuestas que resultan interesantes y memorables. La idea no es que los alumnos tengan que aprender, sino que quieran aprender.
Las sillas no son para sentarse "únicamente", son para pensar, para aplicar lo aprendido, para crear, para imaginar, para hacer, para aprender.
Prólogo
Antes de comenzar ...
Capítulo 1. A pensar se aprende
Capítulo 2. La reflexión del pensamiento
Capítulo 3. Pensadores creativos y curiosos
Capítulo 4. Pensamiento en acción
Capítulo 5. Pensar a través de la imagen
Capítulo 6. Pensar de manera innovadora
Capítulo 7. Lectores y escritores críticos
Capítulo 8. El poder de las preguntas
Capítulo 9. Evaluar para aprender
Capítulo 10. Metodologías activas
Capítulo 11. Conclusiones finales
Edad recomendada: Adultos.